Carta desde Fodepal

(Nuestro compañero Santi Alonso nos autoriza a publicar en este Cuaderno un extracto del correo que envió hace unos días a sus colegas del Comité de Ingeniería y Desarrollo Sostenible del Instituto de la Ingeniería de España, lo que agradecemos a su autor, dado el interés general de sus observaciones)

FODEPAL va bien. Os pido, por favor, que entréis en la web que va abajo. Creo que hemos hecho un buen trabajo, partiendo del cero absoluto. Lo que no sé es qué pasará este año en que se acaba. Eso es lo que me tiene bastante ocupado y, sobre, todo, preocupado.

Me da rabia que, una vez más, lo que se ha montado con esfuerzo y está ya en marcha con éxito, se venga abajo de golpe. ¿Recordáis el CIFCA? Yo tengo la conciencia tranquila, y estoy intentando que perdure, pero si al final no puede ser, pues, a otra cosa mariposa, pasaremos página, comenzaremos otra etapa y siempre podremos decir como en la película del Bogart: " Fue bonito mientras duró…"

Nosotros ya estamos con la mente en el regreso. El 11 de julio acaba mi contrato y no lo renovaré. En septiembre reanudaremos la vida "activa" en los Madriles tras este pequeño lapsus de seis años. Tengo ganas, de verdad. Ya esto se hace un poco largo.

En cuanto a lo de la “sostenibilidad” por estas latitudes, opino que lo mejor que podemos hacer es sembrar e intentar el cambio de mentalidades. El presente está bastante negro, entre los lógicos apetitos de progreso (con el modelo insostenible que todo el arco político del planeta hoy consagra como meta) y la aparición de, para mí peligrosos esquemas cuasi totalitarios enmascarados en apariencias soberanistas, indigenistas, y de “nueva” izquierda.

Si allí, en España, hay urbanismo salvaje, no os cuento lo que esta pasando, por ejemplo, en Santiago de Chile en estos breves años....Se acabó el marco escénico de la Cordillera, se acabó lo que era uno de los paisajes urbanos más bonitos del mundo.

Se acabó la gestión del bosque nativo, porque hay que mandar chips para las “celuloseras” de Japón. Se acabó poder comer marisco de la costa sur, porque las salmoneras tienen que funcionar como establos para ser productores a nivel mundial....

Lo malo para la “sostenibilidad”, es que todo este desarrollo se les está vendiendo a costa del esquilme de los recursos naturales, y la contabilidad del patrimonio natural, como posible herramienta de control, ni se sabe, o no se quiere saber lo que es.

Hay mucho que hacer , bien lo sabéis, en esta maravillosa región latina, pero es labor de generaciones.

Os dejo por hoy; la próxima será con alguna fotos.

Un abrazo muy fuerte a todos,

Santiago González Alonso
Director
PROYECTO FODEPAL RLC FAO - Naciones Unidas
www.fodepal.org